Hola, les escribo con un poco de mal humor, pero ya se me irá pasando a medida que recuerde lo que he vivido y les relate. El por qué de mi mal humor? Porque la computadora que me compré hace poco para documentar todo es realmente mala, y cuando terminé de escribir todo el post, se "congeló" y perdí todo lo que había escrito, no se pudo recuperar de ninguna forma. Sólo un consejo, si pueden no se compren nunca la marca "ACER", todas mis experiencias con esa marca han sido malas! Es cierto es que barata, pero a veces mejor esperar un poco, ahorrar algo más, y comprar algo de mejor calidad.
Bueno, ya me cambió el humor, jaja. Vamos a escribir un post mucho mejor que el que tenía escrito antes!!! Si recuerdan habíamos dejado todo en Máncora, en el Hostel Loki, en el que me quedé por 2 noches para conocer Máncora.
El personal del Hostel muuy buena onda, me dejaron dejar la moto en el estacionamiento, me recibieron muy bien, guardé todas las maletas en un cuarto, y cuando llego a la habitación, muy limpia, ordenada, al igual que los baños!
Todo excelente, salvo que la primer noche no pude dormir hasta las 4 am, porque la gente del Hostel autoriza que se arme fiesta hasta la 1 am en el Hostel (algo muy bueno), pero luego la gente se va a una disco/boliche a sólo 50 metros, sobre la playa, haciendo que las habitaciones más cercanas no puedan dormir ni siendo sordos! Por eso al día siguiente pedí cambio de habitación y por suerte me lo han podido dar así que genial, ya dormí mejor!
Me desperté el primer día y me fui a ver las tortugas marinas a un muelle cercano llamado Ñuro, donde uno paga una entrada muy barata y te dejan ingresar y nadar con las tortugas que por cierto no son nada tímidas, ya que van y vienen todo el tiempo, y hasta se acercan a las personas para que las puedan tocar quienes se sientan más seguros. Eso no era mi caso, ya que me metí, pero cuando estaba en el agua no se veía mucho, sólo sombras enormes que se acercaban y daban un poco de "cosa", jaja. Así que yo levantaba las piernas como quien lo hace cuando están trapeando el piso mientras uno está sentado. Luego subí y tomé algunas fotos desde arriba, porque desde abajo el agua estaba bastante oscura y no se podían tomar buenas fotos.
Luego regresé al Hostel, realicé el cambio de aceite y filtro de Pampa, que ya lo tenía bien merecido, y me fui a darme un gustito al centro, ya que hace mucho tenía ganas de comer una buena pizza, y por suerte encontré el lugar correcto, donde comí una increíble pizza y conocí a unos Ecuatorianos que me invitaron a su casa cuando pase por Loja, y aquí estoy.
Loki Hostel: Un muy buen lugar para quien quiere unos días alejado totalmente de la ciudad y de la vida diaria, pero no es un lugar recomendado para quien quiere descansar, ya que hay fiesta hasta muy tarde y no deja dormir mucho. La pileta dentro del complejo es muy linda y limpia, pero atenta contra los que quieren bañarse en el mar, ya que te dan ganas de quedarte ahí todo el día sin bajar a la playa que está a sólo 50 metros. Quienes te atienden tienen muuyy buena onda y servicio, siempre enfocados en que todo salga bien. Los turistas, hay de todo, pero se ven con frecuencia esos "zoombies" que se levantan tarde, bajan a almorzar con los ojos cerrados, no emiten palabras, luego se recuestan a la sombra, se meten una vez a la pileta, y después de un rato empiezan nuevamente a tomar alcohol para seguir con esa rutina que, según yo creo, es enfermisa y sólo evita que se viva la vida como se puede hacer. No bajan a la playa, no salen del hostel, viajan miles de kilómetros para estar en Máncora, pero en definitiva no conocen Máncora ni lo que la caracteriza, sólo el hostel donde están alojados. Lo bueno? Que no molestan a la gente, se los puede tolerar perfectamente, porque no interfieren con lo que uno hace.
De ahí de Loki me fui unos kilómetros más al norte, hasta Cancas, pasando Punta Sal, donde me estaba esperando Abi para quedarme unos días en su casa de playa que tiene 100 metros de frente al mar, todo un paraíso! Llegué y me encontré con la paz y la tranquilidad en persona, una cama colgante de 2 plazas (a lo hamaca paraguaya), y muchos animales salvajes que estaban en su "granja" de recuperación de animales. Entro ellos se pueden mencionar al tigrillo, unos caimanes bebés, unos venados (una estaba preñada), unos pavos reales, un gavilán y un águila entrenada.
La cama donde pasé ambas noches, con una vista increíble al mar!
Una vista desde mi cama, la misma que tuve ambas mañanas
Maxi en su recinto para protegerlo. Luego lo pasamos con los grandes para que "madure"
Kitty cuidando la puerta de mi habitación
El gavilán que se estaba recuperando...
El águila, la atracción de la casa, y la guardiana de los cielos!
Coincidencia o algo más? El barco en la casa tenía ese nombre, igual que el helado que me comí el día anterior...
Los pelícanos no paraban de pescar y pasar al ras del agua...
Un increíble atardecer que se ve y disfruta mucho más en vivo que en la foto
Como a Abi le gustan mucho los fierros, tenía unos leds de más que me regaló y con eso hizo su gran aporte a este viaje! No los pude rechazar porque por más de que tenía muy buenas luces y Jorge Ulloa me había arreglado de manera increíble las fijaciones, no eran de led y consumían mucho, afectando la vida de la batería, sobretodo para etapas finales como Alaska donde el frío la va a exigir más!
Impensado para mí, el día que me voy, a las 7 am me levanto para llegar temprano a la frontera y me encuentro con que también se habían levantado Abi, su mujer y hija para despedirme, así que me tomo una foto con todos ellos y con Antonio (guardían de la casa), luego de un buen desayuno completo para salir a rutear unas cuantas horas.
Llego a la frontera con Ecuador y por suerte había muy poca gente, así que hago los trámites y sigo viaje, me dieron permiso para circular por 60 días por Ecuador, más que suficiente ya que pienso quedarme no más de 25 días.
Es increíble como entre que uno abandona Perú y va entrando a Ecuador el clima cambia tanto! Ya se pierden en el fondo del espejo retrovisor los desiertos, la sal del mar y la arena, para encontrarnos con una zona tropical, más selva que otra cosa, con plantas por todos lados, diferentes tonos de verde, desde unos muy intensos hasta otros claritos, pero todo, todo tapado de vegetación! Hasta la punta de los cerros estaba con verde, ya me había olvidado lo que era eso, ni en Bolivia ví algo similar, ya estaba en la zona tropical de Ecuador. Kilómetros más adelante la cosa se vuelve más desértica, pero nunca dejando de lado el verde que completa el paisajes, se cruzan ríos, hasta llueve unos minutos. Para luego, al pasar ya unas cuantas horas, se siente un olorcito muy característico, ese olor a Pino que me gusta tanto y me hace saber que estoy llegando a Loja, mi destino para ese día.
Llegué a Loja y me fui donde me esperaban, en la pastelería y sandwichería de María y Arnó, 2 jóvenes que han armado su negocio hace poco y lo tienen muy bien puesto! María es ecuatoriana, tiene 26 años y estudió gastronomía en Buenos Aires. Arnó es francés, tiene 32 años y es Administrador de Empresas (o algo similar). Entre los conocimientos de María, su don para cocinar, y el toque francés de Arnó, hay puesto un muy lindo lugar donde pasar a tomar un café o un jugo, y donde disfrutar de unos increíbles postres y sandwiches mientras se descansa unos minutos.
Todo esto está situado en el "pueblo" de 180.000 habitantes que es Loja, y digo "pueblo" aunque tenga tantos habitantes, porque la vida aquí es como tal. La gente saluda en las esquinas, los autos frenan y deja pasar a los peatones u a los demás autos, no se usa casi la bocina sino más que para saludar o indicar algo. Ya no es como Perú o Bolivia, el tránsito es mucho más ordenado tanto en la ruta como en Loja, y esperemos lo siga siendo en el resto de Ecuador.
Arnó y María me han dado el living de su departamento para dormir, con un colchón nuevo para que estrene, y hasta con una baño con agua caliente, esa que tanto extrañaba y no sentía desde hacía mucho tiempo!
Hoy nos levantamos temprano porque les surgió un pedido de 100 sandwiches que deben preparar para la Fiscalía General de Ecuador, y siendo un pedido tan grande y sobre todo cuando un negocio empieza, no se puede rechazar, así que les doy una mano acomodando los sandwiches dentro de sus cajitas!
Y ahora me encuentro, luego de un espectacular desayuno, escribiendo este post para mantenerlos informados de mi viaje. Bah, nuestro viaje, porque tengo entendido que también muchos de ustedes se sienten parte del mismo, y me lo hacen saber, así que ahora me siento responsable por seguir escribiendo y no cortarles su historia, y quien sabe, inspiración para cumplir sus sueños o desafíos en un futuro cercano! Porque no hay que dejar para mañana lo que puedes hacer hoy, y mucho menos si se trata de lo que te gusta!
Un saludo muy grande a todos, y muy buen viernes para todos! Que pasen un excelente fin de semana, estén con sus seres queridos, y cada día hagan algo más para estar más cerca de sus sueños!
Javi
